Index ] Up ] [ resena ] reforma ] infosel-noticias ] infosel-concierto ] envelope.gif (4196 bytes) 

Por cortesia de Miguel González

"¡FLANTÁSTICO! POR SILVIA RUANO (Reforma, lunes 2 de agosto de 1999)
Monterrey. Una multitud conformada por más de 7 mil almas retrocedió nueve años en el tiempo y estaló en una euforia especial que desde ayer muchos bautizaron bajo el nombre de Flansmanía.  A un par de semanas de reaparecer ante el público capitalino después de casi una década de ausencia, con un concierto en el Auditorio Nacional el 19 de agosto, y la confirmación de una nueva fecha, el día 20, Flans dio su primer paso ante los regiomontanos la noche del sábado en el Auditorio delParque Fundidora de la capital neoleonense.  Eran las 20:50 horas cuando Ilse, Ivonne y Mimi aparecieron sobre el foro para arrancar el primer conciert de su gira nacional sin un gran alarde en cuanto a producción, pero sí una muestra de entrega que aún luego de dos horas y repetir algunos de sus clásicos, dejó con ganas de más a la incondicional audiencia.
La noche comenzó con "No me quiero casar". La figura difusa de las tres cantantes vestidas de novia se coló tras el telón transparente con la imagen de aquella portada de su cuarto disco.  Se escucharon los primeros acordes a la par de gritos del público, que alcanzó a llenar cada hueco. El telón cayó para dejarlas al descubierto en lo que fue, según aseveró el trío al final de la jornada, una experiencia inolvidable.Ilse, chiquita y ágil como siempre, Ivonne, con sus locuras, y Mimi, con sus
puntadas, feliz por estar en casa; las tres, como cuando tenían 20, continuaron con "Esta noche no" y "Billy".
Una gran pantalla al fondo del escenrio comenzó a desplegar figuras de colores como un caleidoscopio y al grito de ¡ánimo, Monterrey" y el ritmo de "Tiraré" la gente se comenzó a prender. Se escucharon los primeros coros de la noche en el área de butacas y comenzaron a se guir los pasos de las tres mujeres.  La mecha acabó de encenderse con el público de pie cuando sonaron las primeras notas de "20 millas". Luego vino un respiro con "horas", dedicada a Monterrey en la voz de Mimi, mientras la pantalla desplegó imágenes de relojes, pero el ritmo se recuperó enseguida con "Alma gemela".  Y aprovechando la melodía de esta canción, para echar abajo los rumores de quienes pensaron que Flans era un truco más de la tecnología musical, las chicas entonaron algunos versos a capella.  Luego ofrecieron "Me he enamorado de un fan", "Giovanni amore" y para que nadie dejara el ambiente pidieron "arriba, a bailar todo mundo, vamos a pensar que todos aquí tenemos menos de 15 años!".  La gente lo tomó en serio y de pie, con todo el ánimo del mundo, coreó y siguió el paso de "Uhm, ah, oh".
Uno de los momentos más emotivos de la noche vino cuando Ivonne tomó el micrófono y cantó "Desde la trinchera". La joven no pudo contenerse y derramó algunas lágrimas que sus compañeras apoyaron con abrazos.  Luego el ánimo volvió con "Las mil y una noches". Ivonne dejó atrás la nostalgia, cargó a Ilse y luego, las dos abrazadas a Mimi corrieron, brincaron y bailaron, aunque entonces fue Ilse la que se puso sentimental y antes de cantar "Ay amor" no pudo evitar el llanto.   se recuperó enseguida para cantar y bailar "Tímido, que ahora sí, ya sin timideces, bailó medio auditorio. Los gritos y bravos se multiplicaron para escuchar el esperado "Bazar" que se acompañó de la proyección del video.  A estas alturas la Flansmanía estaba al máximo. El trío salió un momento y regresó con pelucas de colores, muy pop, a cantar "Corre corre" antes de
despedirse".  Claro está que el público no las dejó ir. Al son de ¡otra, otra! trajeron de vuelta a las tres mosqueteras que encantadas cantaron "Mosquito bilingüe", "Él no es un Rocky" y la esperadísima "No controles".  Volvieron a despedirse, los músicos se retiraron, pero la gente no estaba dispuesta aún a marcharse. Así que aplaudió, pidió otra, golpeó las butacas,
chifló. Insistió e insistió hasta que Flans regresó.  Eran las 22:30 horas, y los pocos que se habían ido regresaron corriendo. El
personal de seguridad en el Auditorio no hallaba qué hacer para poner orden.  No había más canciones, así que repitieron "20 millas" y "Bazar" para poner el punto final mientras el aplauso se prolongaba y las Flans corrían, se revolcaban y aventaban besos emocionadas".